Si quieres hacer de tu ramo de flores un eterno recuerdo del gran día y estás pensando en conservarlo y no lanzarlo tras la ceremonia, las flores secas pueden ser una opción viable, luego de tu boda podrías mantenerlas en una caja de madera y darle un toque rústico junto a otras piezas como las tarjetas de invitación y demás recuerdos de la boda.
Si tu ramo es de flores naturales y deseas secarlo para guardarlo, puedes colgarlo hacia abajo en una habitación oscura y con buena ventilación.
Es cierto que las tendencias referidas a ramos de novias han cambiado, y ahora podemos utilizar una gama ilimitada de colores, sin embargo debes evitar mezclar muchos tipos de flores, sólo utiliza las necesarias que vayan de acuerdo con tu vestido, la estación y el ambiente de la celebración.
Busca la armonía entre tu ramo y todos los elementos que hayas previsto que sean florales, por ejemplo el tocado, la solapa del novio y la decoración.
Si el novio va a lucir una flor en la solapa, procura que lleve concordancia con el ramo que tú lucirás.
Se cuidadosa si tu ramo posee flores que producen polen, podrías correr riesgo de contraer alguna alergia o manchar tu vestido.
Al seleccionar tu ramo, ten en cuenta el maquillaje que llevarás y programa una fecha para probar conjuntamente el peinado, vestido y accesorios.
Si tu boda es en invierno, agrupa las flores de forma compacta, ten presente que la flor que elijas debe ser propia de esa época del año.
Cuando recibas el ramo en tu casa y hasta el momento de dirigirte a la ceremonia, ponlo con cuidado en una habitación fría y con poca luz para que se conserve mejor.