Para asistir a una boda guapas y resplandecientes: las futuras mamás emanan una luz especial que, durante años, las firmas de moda premamá se han empeñado en ocultar bajo capas y capas de tela. Prendas XL y sin forma eran la máxima, especialmente en la recta final del embarazo, para desesperición de las 'adictas' a la moda, que tenían que renunciar a lucir curvas en favor de la comodidad
Largo, corto, al biés, de corte imperio o con escote corazón, Heidi Klum, y su sencilla linea de moda Lavish, nos dan la clave para lucir perfecta, sea cual sea el mes de gestación en el que estés: en efecto, el clásico negro, en versión little black dress u oversize, es perfecto, especialmente si tienes varias bodas a las que acudir pero no quieres invertir grandes cantidades de tiempo (y dinero) ideando mil y un estilismos diferentes. Basta con que lo combines con unos zapatos y un bolso de mano de colores brillantes para darle el toque chic perfecto: recuerda, menos es siempre más...
Los estampados son para el verano... y para las futuras mamás que busquen un look más desenfadado y juvenil. Los vestidos de la línea De Luxe & Party de Mit Mat Mamá proponen cortes muy sexys, plagados de mariposas, flores y estampados geométricos, que van desde el nude, el color de moda de la temporada, hasta vibrantes tonos morados y verdes.
Los vestidos-joya son otro de los must a la hora de deslumbrar, especialmente en las ceremonias que tengan lugar por la tarde-noche: el escote es uno de los puntos fuertes de la fisonomía de las mujeres embarazadas (de ahí que casi todos los vestidos lo realcen con favorecedores escotes en uve). Atrévete a realzarlo aun más con un bordado de cristales, encaje o pedrería, como los de Bellybutton o Paramamá. Deslumbrarás.
Via: Hola
